"The Walking Dead". El comienzo de una serie terroríficamente buena.

¡ATENCIÓN! Si tienes pensado ver la serie, no sigas leyendo.

Tal y como todos esperábamos, el episodio comienza con los dos sherif intentando atrapar a unos delincuentes... pero antes de esto, para "abrirnos un poco el apetito" comienzan con una escena en la que Rick (el protagonista) tiene que matar a una niña zombie.

La similitud que tiene el episodio con el comienzo del cómic es asombrosa (y esperemos que sigua así).
La caracterización de los personajes está muy lograda al igual que el maquillaje de los zombies.

Los escenarios e interpretación de los personajes están tan conseguidos que hacen que puedas meterte de lleno en la historia... tanto, que puedes ponerte perfectamente en el lugar de Rick y sentir la angustia y los dilemas morales que está viviendo; ya sea pegándole un tiro en la cabeza a un zombie o en el trato con las personas que se va encontrando a su paso.

Una de las escenas que más me ha gustado, como ya se ha podido ver, es la primera, en la que está buscando gasolina y de repente se encuentra con una niña a la que intenta ayudar hasta que ésta se da la vuelta y ve que se trata de un zombie que intenta comerle.

Otra de las que más me ha impresionado es la de la chica de la bici. Una vez sale del hospital y va de camino a su casa, ve una bici al lado de la carretera y junto a ella un cadaver mutilado de cintura para abajo y en un estado de descomposición bastante avanzado. Él va a coger la bici y el cadáver empieza a moverse hacia él... es entonces cuando Rick sale corriendo a casa para buscar a su mujer y a su hijo temiendo lo peor.

La escena más impresionante por su majestuosidad y patetismo es la de la entrada de Rick a la ciudad de Atlanta (que además es el cartel de la promo), donde se supone que se encuentran refugiados los supervivientes de la zona. En ella vemos como los coches están atascados (y vacios) en la carretera que conduce hacia afuera de la ciudad, mientras que él se dirige con su caballo por los carriles de entrada, que están completamente vacíos.


Si quieres saber algo más, léete el cómic o ve la serie.


[coño ya]

¡Feliz día de la toalla!

"crazy crazy nights"

Hace un par de días soñé con el concierto de los Kiss...

Recuerdo que estábamos haciendo cola para entrar al recinto y la mayoría de las personas eran antiguos compañeros del colegio, aunque solo hablé con el empollón y con otro que no era ni de mi clase, pero estaba por allí.

Entramos y había unos pasillos. En cada uno había una barca, porque por lo visto aún no estábamos en el recinto donde se encontraba el escenario, y para llegar hasta allí había que ir por el agua.

En la barca en la que montamos nosotros, estaban mis compañeros del instituto y algunos amigos a los que seguro que no le gustan los Kiss, pero allí estaban ellos, oiga.

Por el camino íbamos en una mezcla entre río y mar (llamémoslo mari o llamémoslo rima) donde había escenarios chiquititos con muñecos gigantes de los Kiss.

Llegamos al recinto. La entrada parecía las salidas de las atracciones de los parques de atracciones.

Éramos los primeros... y me desperté cuando íbamos entrando por la puerta así que nos perdimos el concierto.

[jo... yo quería saber cómo acababa]

ya vale, ¿no?

Hace unos años había una persona en mi vida que, no es que me tratara fatal, simplemente me tratara como si fuese mi madre, o incluso peor.
Me regañaba si saltaba por la calle, si iba cantando, si no estudiaba para un examen (aunque luego aprobase), si gritaba (aunque gritase más que yo), si me dolía algo o incluso si me caia.
Lo peor de todo es que no podía ignorarla porque era la hermana de una amiga (y dejémoslo ahí).
Tan solo nos llevábamos unos meses (y aún así, por meses, yo era más mayor que ella, pero claro... ella se veía super madura y super mayor y al reso del mundo de lo más infantil.

Con el tiempo nos distanciamos, cosa de la que me alegro bastante.
Hace poco hablé con ella y descubrí que ahora (le recuerdo a quien lea esto, que tiene mi edad) se comporta como me comportaba yo con diecisiete años. No la voy a juzgar ni voy a decir que con tanta madurez se ha vuelto gilipollas (o inmadura, llámalo como quieras)... aunque parece que lo digo, ¿eh?... en fin. A lo mejor se ha dado cuenta que no pasa nada por hacer el tonto de vez en cuando, tengas la edad que tengas.

Ahora me he topado con alguien igual, la única diferencia es que esta persona solo me supera en un par de años, pero se cree que tiene cincuenta años más que yo.

Lo malo es que he hecho todo lo posible por ignorar todo esto e intentar llevarme más o menos bien con este personajillo (más que nada porque es amiga de un amigo y yo por este amigo me trago el orgullo y todo lo que haga falta), pero no lo he conseguido... no porque no quiera o no lo haya intentado, sino porque esta persona está tan cegada en mostrar su madurez y mi inmadurez, que le da igual lo demás... da igual lo que le diga o lo que haga que lo va a ver mal, porque sí, porque le sale del coño.

Y por este tipo de razones odio a la gente que se cree más madura que yo, por eso y porque me hacen sentir incómoda.


[os odio viejóvenes de mierda]

Feliz Día Mundial del Traje de Gorila

[aunque sean atrasadas]

yo, yo, yo... y mi prima

El comportamiento de algunas personas de mi alrededor me ha hecho buscar este tipo de cosas...

Jean Piaget (1896-1980) sostuvo que los niños pequeños son egocéntricos. Esto, de ninguna manera significa que sean egoístas, sino que no tienen todavía la suficiente habilidad mental para entender que otras personas puedan tener diferentes opiniones y creencias con respecto a la de ellos.

...y también me han hecho ver que hasta la persona más abierta y más tolerante del mundo, a veces (cuando quiere) puede ser todo lo contrario.


[nada más que añadir]

de oca en oca... o algo así

Mi trabajo en el Dia% se acabó en agosto... lo acabé yo, estaba harta. Cada día me enviaban a un Dia% distinto y me avisaban con muy poco tiempo por lo que, siempre llegaba tarde. Empezaron "castigandome" sin mi descanso (como si fuese el colegio y te quitaran el recreo, igual), un "compañero" me acusó de robarle nueve miserables euros (hijo mio, si te robo, no va a ser calderilla), les pedí mis dos días correspondientes para poder ir a una boda y no me los quisieron dar... así que me los cogí por mi cuenta. Me fui un par de semanas antes. Duré algo menos de dos meses.

Después de esto me cogí dos semanas de vacaciones, porque sí. Estuve en Barcelona y en Vélez (porque yo lo valgo).

A la semana siguiente de llegar a Madrid conseguí otro trabajo de camarera... en un Jamaica Coffee Shop. Al principio (en las dos primeras semanas) estaba muy bien... pero llegó la jefa de sus vacaciones. Era un ser insoportable. No se podía trabajar con ella porque lo quería todo a su manera, lo pedía todo a gritos, cambiaba las cosas de sitio y me echaba a mi la culpa... una joya, vaya. Estaba hasta el coño.
A finales de noviembre decidí marcharme de allí, no podía con aquel sitio (que tan lejos tenía) ni con la gente. Todos se quejaban de los demás y yo me quejaba de la jefa... más quemada no podía estar.
Por suerte, me llevaba bien con dos de mis compañeros, así que les conté que me iba y me dijo uno de ellos "no te vayas, porque este fin de semana te van a echar"... con tanta suerte, que justo ese viernes me llamaron para empezar a trabajar en otro sitio al lunes siguiente. Duré dos meses y pico.

Ahora trabajo para una empresa que tiene contratada la Comunidad de Madrid dando citas para el médico... no deja de ser de teleoperadora, pero podemos hacer lo que nos de la gana (puedes hablar con las amigas en el feisbu tranquilamente y leer sin que nadie te diga nada, mientras hagas tu trabajo, claro). El horario (aunque haya que madrugar mucho) está de puta madre porque a las 14:30 salgo y tengo toooooda la tarde para hacer lo que quiera. El jefe no te grita, te trata todo lo bien que puede y nunca nos dicen nada de los descansos... me encanta mi trabajo nuevo (de momento). Llevo un mes y poco... y espero que me dure más que los dos anteriores.

[así, de repente]